Cinema Jove hace gala de sus 40 años como festival
El Festival Cinema Jove de Valencia inauguró su 40ª Edición en una gala celebrada el 19 de Junio a las 18:30h en el Teatro Principal de Valencia.
Dirigida por Jaime Pujol junto a Mamen Mengó y producida por Marta Ramón Ferrandis, la gala fue conducida por la actriz Tània Fortea y el actor Roberto Mayo, además de la dirección musical de Víctor Lucas y los intérpretes Dani Lucas y Alba Rizek. El espectáculo estuvo cargado de sketches humorísticos y presentaciones con un tono imprevisto y original, a los ciclos y diferentes secciones que componen el festival.
Principalmente se homenajeó la trayectoria del festival, esbozando desde el recuerdo de la primera persona que compró una entrada y se sentó en una butaca a ver la primera proyección, hasta los grandes nombres que han pasado por las puertas de Cinema Jove ya sea Sean Baker, Lynne Ramsay o Mia-Hansen Løve. La pregunta resonando con frecuencia era sobre el futuro del cine: ¿qué será de nosotros como espectadores y quienes estarán tras las cámaras dentro de 40 años?, ¿qué forma tomará este?.
La actriz María Romanillos («La casa») fue galardonada con el premio «Un futuro de cine”. En su discurso se mostró esperanzada sobre el porvenir de este arte y reivindicó unas condiciones de trabajo dignas, que el set sea un espacio seguro para el equipo libre de abusos de poder, sobre todo machistas.
Carlos Madrid, director de Cinema Jove, habló en su discurso sobre cómo el festival ha acogido y promocionado desde sus inicios a jóvenes cineastas que en su día necesitaban que alguien les apoyara y creyera en ellos, siendo actualmente artistas consagrados que cosechan premios y selecciones en los festivales internacionales más prestigiosos. Recomendó a los asistentes tener en cuenta, tanto en el presente como en el futuro, los nombres de directores y actores que el festival detecta. Desde el 2017 con un total de 6.000 espectadores, el crecimiento del festival ha aumentado exponencialmente, alcanzando en 2024 los 15.000 asistentes.
Finalmente destacó que «lo que mueve al cine son las ideas, la pasión, la necesidad de entender al ser humano mediante la creación de imágenes y la voluntad de compartirlas«. Sobre todo los jóvenes, que entendemos el mundo mediante imágenes y por lo tanto el séptimo arte no puede sernos ajeno.
La gala se clausuró con la proyección de Riviera (Orfeas Peretzis) presentada por el director y la actriz protagonista. El filme se trata de un coming-of-age griego, transparente en su crítica social a la turistificación de las regiones mediterráneas populares como destino vacacional. Narra el último verano de Alkistis ,una joven que lucha contra la decisión de su madre de vender a una inmobiliaria la casa en la que han vivido siempre y alquilan habitaciones durante los calurosos meses. Además investiga temas como las primeras relaciones románticas, el duelo y las amistades femeninas entre dos personalidades abruptamente diferentes.
Como anécdota, la actriz protagonista, después de recorrer la ciudad, añadió que Valencia se adapta fielmente a lo que quiere contar la película. Algo que sin lugar a dudas, suscitó aplausos reivindicativos y rabiosos.