El Hospital Clínico de Valencia incorpora un TAC cónico de última generación para cirugía maxilofacial
- La nueva tecnología, que ha supuesto una inversión de más de 400.000 euros, mejora la precisión diagnóstica y quirúrgica y reduce la exposición a la radiación
- El servicio de Cirugía Maxilofacial refuerza su posición como centro de referencia de alta complejidad con esta incorporación

Valencia, 12/08/2025
El Hospital Clínico Universitario de Valencia ha incorporado a su cartera de servicios un nuevo TAC cónico de última generación para el Servicio de Cirugía Maxilofacial. Para este equipo se ha realizado una inversión total de 416.545 euros, 160.712 euros para el TAC más 255.833 euros para adecuar los espacios de la zona de Radiología que lo albergan junto a otros equipos diagnósticos.
La tomografía computarizada de haz cónico (CBCT, por sus siglas en inglés) es una tecnología avanzada de imagen médica que permite obtener reconstrucciones tridimensionales de alta calidad de la anatomía maxilofacial. A diferencia de los TC convencionales, la CBCT utiliza una dosis de radiación significativamente menor, lo que la convierte en una herramienta más segura para los pacientes.
Tal y como ha explicado Miguel Puche, jefe del Servicio de Cirugía Maxilofacial, “la incorporación de esta tecnología responde al compromiso del Hospital Clínico de Valencia con una medicina más precisa, segura y centrada en el paciente. Con esta nueva incorporación, el Servicio de Cirugía Maxilofacial, reconocido como centro de alta complejidad o de nivel 4, se consolida como referente en el uso de herramientas innovadoras para mejorar la atención sanitaria”.
“La CBCT nos permite planificar las intervenciones con una precisión milimétrica, reduciendo riesgos y mejorando los resultados clínicos. Es un avance que sitúa al hospital en la vanguardia de la cirugía maxilofacial”, ha añadido.
Imágenes 3D de alta calidad y menor exposición a la radiación
Este tipo de TAC ofrece varias ventajas significativas en cirugía maxilofacial, como una menor exposición a la radiación, imágenes 3D de alta calidad (lo que permite una visualización detallada de la anatomía, incluyendo dientes, huesos, nervios y tejidos blandos) y la capacidad de visualizar tanto estructuras óseas como tejidos blandos. Esto permite una planificación quirúrgica más precisa, un mejor entendimiento de la anatomía del paciente y ofrece información adicional que minimiza el riesgo de dañar estructuras anatómicas.
Gracias a la calidad de imagen y la capacidad de visualizar la anatomía en tres dimensiones, los cirujanos pueden planificar procedimientos con mayor precisión, como la extracción de muelas del juicio, o la corrección de deformidades faciales.
La CBCT utiliza una dosis de radiación significativamente menor en comparación con la tomografía computarizada médica (TC), lo que reduce el riesgo para el paciente. Permite evaluar la calidad y cantidad de hueso, lo que es fundamental para la planificación de procedimientos quirúrgicos maxilofaciales.
También supone mayor comodidad para el paciente. La CBCT suele ser un procedimiento rápido e indoloro, y el paciente puede ser escaneado sentado, lo que puede resultar más confortable, especialmente para aquellos con claustrofobia.