Google apelará la multa de 4 mil millones de dólares impuesta por la Comisión Europea

La multinacional Google recibió el pasado verano una de las multas más elevadas que se recuerdan en la historia del mercado único europeo, una que ascendía a más de 4.000 millones de dólares, como consecuencia de una serie de supuestas maniobras monopolísticas que chocarían radicalmente con los principios de la libre competencia y la necesidad de mantener cierto equilibrio de fuerzas en el sector.

Entre ellas, como argumentaba la comisaria de competencia Margrethe Vestager, destacaba el aprovechamiento de la posición dominante del sistema operativo Android en el mercado de la telefonía actual para forzar a sus usuarios a utilizar el buscador de la compañía y bloquear el acceso a otras alternativas. «Google ha negado a sus rivales su derecho a innovar y competir en condiciones justas», afirmaba la socialista danesa en su momento.

Pese a que, solo unos días después de conocerse la noticia, la compañía anunciaba unos beneficios trimestrales que superaban por segundo año consecutivo su marca histórica -los cuales le permitirían pagar varias multas similares a la impuesta por el ejecutivo comunitario-, ahora Google ha anunciado que apelará la decisión de la Comisión por la vía administrativa y, si hace falta, también por la judicial.

«Ya hemos registrado oficialmente nuestro recurso de apelación», se ha limitado a confirmar la firma al diario económico Financial Times.